jueves, 19 de julio de 2012

18-07-2012
Comunicado de la Comisión de Cultura y Patrimonio, 
del Consejo Consultivo Comunal 7


Los integrantes de la Comisión de Cultura y Patrimonio, del Consejo Consultivo Comuna 7 (Flores-Parque Chacabuco) manifestamos nuestro repudio ante la arbitraria remoción de la lic. Mónica Capano al frente de la Comisión para la Preservación del Patrimonio Histórico Cultural (CPPHC) de la Ciudad de Buenos Aires. 
Destacamos el alto grado de compromiso ético manifestado durante su gestión, donde vecinos y organizaciones barriales hemos sido escuchados, orientados y acompañados en nuestros reclamos por la defensa del patrimonio material e inmaterial, valores simbólicos y afectivos que nos pertenecen.
En una ciudad donde vemos el paisaje contaminarse por el avance de la construcción no planificada, a la sombra de la especulación inmobiliaria, la gestión de Mónica Capano ha sido indudablemente un obstáculo importante para sectores que han visto peligrar sus negocios, sin contemplar el daño irreparable que causan, en detrimento del patrimonio, y traspasando todos los derechos de los ciudadanos, de hoy y mañana. 

Comisión de Cultura y Patrimonio
Consejo Consultivo Comuna 7


_______________________________________________________________________________

El patrimonio urbano en la mira

Mónica Capano: La especulación inmobiliaria no solamente tiene como objetivo la idea de ganar dinero, sino algo mucho más serio, que es ideológico: borrar la memoria.  Mediante un proyecto de Ley...

Mónica Capano: La especulación inmobiliaria no solamente tiene como objetivo la idea de ganar dinero, sino algo mucho más serio, que es ideológico: borrar la memoria. 

Mediante un proyecto de Ley presentado sobre tablas –evitando todo tipo de difusión– por los legisladores de la Ciudad Julio Raffo, Lía Rueda y Fabio Basteiro, el pasado viernes 13 de julio de 2012, votado luego por el bloque PRO y Proyecto Sur, se removió a Mónica Capano, secretaria general de la Comisión para la Preservación del Patrimonio Histórico Cultural (CPPHC) de la Ciudad de Buenos Aires, reemplazándola por un nuevo funcionario. La destitución compulsiva de la secretaria constituye el hecho más significativo de la creciente ofensiva del macrismo para transformar a la ciudad en un coto inmobiliario de inimaginables consecuencias sociales y culturales dado que, con esta medida, fue concedida la libertad al zorro dentro del gallinero.
Las cada vez más acotadas funciones que la licenciada Capano pudo desarrollar a través de la Comisión eran, quizás, el último bastión oficial de defensa patrimonial de la ciudad, cuyo cuidado, en ese sentido, queda en adelante en manos de las ONGs dispuestas a dar pelea sobre el tema.
La licenciada Capano tuvo la gentileza de concedernos, el lunes 16 del corriente, la entrevista que trascribimos a continuación.

Mario Bellocchio: Comencemos por informar de qué se ocupa la Comisión que usted presidía.
Mónica Capano: La CPPHC es un organismo que se crea por ordenanza allá por el año 1987, es decir que es anterior a la Constitución de la Ciudad. En relación con los tiempos que corren y las cosas que fueron sucediendo, su estatus en el día de hoy, como organismo descentralizado, es bastante diferente y digamos que definir donde está ubicada se torna un poco más complejo.
La Comisión tiene seis miembros que elige el poder ejecutivo y tres que designa la Legislatura. Para compensar este desequilibrio, la persona a cargo de la secretaría general, que preside la Comisión, es una de las votadas por la Legislatura. En mi caso, me votan en diciembre de 2009 para iniciar el mandato 2010/2011 –que se prorrogó hasta la fecha de hoy– por elección unánime. Es decir: hubo acuerdo de todos los representantes del pueblo de la Ciudad. Esto es importante porque al ser votada por los representantes hace que tenga legitimidad e incluso no se me pueda remover si no es por una falta grave y que tenga que hacerlo la propia Legislatura.
El hecho de que en mi gestión yo pensara en otro rol para la Comisión quizás hizo que fueran apareciendo trabas de parte del Ministerio de Cultura, que si bien no tiene injerencia sobre la Comisión, como la Comisión no tiene su propio cuerpo administrativo –que actualmente tienen los demás organismos descentralizados–, hace que su presupuesto lo maneje el Ejecutivo.

M.B.: Usted dijo “pensé otro rol”. ¿Cuál es ese otro rol?
M.C.: Como la Comisión fue siempre un apéndice del Ejecutivo en realidad hacía lo que determinaba la Dirección de Patrimonio, que es posterior en su creación, lo que producía una división de roles. O sea: la Dirección de Patrimonio del Ministerio de Cultura se ocupaba del patrimonio material y la Comisión de Patrimonio, del patrimonio inmaterial y de hacer una serie de publicaciones y tocar temas –que en realidad no significaban ningún conflicto para nadie– donde no estaba la agenda. Yo me planteé cuando asumí : ¿dónde está la problemática del patrimonio? y advertí que estaba en las luchas de los vecinos –que comenzaron a insinuarse y se fueron multiplicando y profundizando– que veían a sus barrios arrasados por la especulación inmobiliaria, que no solamente tenía como objetivo la idea de ganar dinero de la mano de una mal entendida modernización –una idea de progreso que es propia de la ilustración y que en realidad ya ha sido cuestionada desde distintos ángulos del pensamiento– sino que para mí implicaba algo mucho más serio, que es ideológico y que es borrar la memoria.  
Uno está viendo esto en Buenos Aires, esta ciudad de los porteños –además, orgullo de los argentinos– que se ha convertido en una ciudad anodina, neutra, donde no estamos viendo matices y se está dejando de lado la diversidad. A mí me gustaría hacer un paralelo con lo que ha significado la Ley de Medios que plantea la posibilidad de acceder a una diversidad de ofertas, es decir, no quedarnos con esa idea del pensamiento único, que fue tan propia del neoliberalismo, tener la posibilidad de escuchar múltiples voces y poder hablar y poder expresarse desde distintos ángulos.

M.B.: Las voces barriales…
M.C.: Sí. Esta es la ciudad de Buenos Aires: una ciudad de barrios donde uno iba caminando y a poco se daba cuenta de que había entrado en otro microclima porque había pasado de un barrio a otro.  Donde los distintos edificios nos hablaban de distintas historias y distintos relatos y donde, de repente, nos empezaron a aparecer unos edificios llenos de vidrios, edificios que a veces están deshabitados porque son construidos para la especulación. Y acá también hay un conflicto que, más allá del patrimonio arquitectónico, tiene que ver con lo social: ¿adónde está yendo toda esa gente que está siendo expulsada de los barrios?  Sabemos que hay un proyecto muy fuerte en la Boca, disfrazado como “distrito de las artes”, que es un proyecto de brutal exención impositiva para modificar al barrio, hacer una nueva Boca, para emprendedores de infraestructura cultural. Esto es lo que nosotros, como Comisión, vimos que estaba pasando. Y ahí dijimos: ¿de qué lado estamos? Estamos del lado de los vecinos. Y nos dimos cuenta de que si bien los vecinos tenían mucho trabajo, salían a protestar,  pero a veces carecían de los instrumentos legales o de los marcos teóricos y desde ahí emprendimos una tarea de acompañamiento, un aprendizaje… Por eso ahora que se termina este mandato quiero agradecer haber tenido la oportunidad de ese contacto.

M.B.: ¿Qué le deja el paso por la Comisión?
M.C.: En estos dos años y medio aprendí muchísimo porque me puse del lado correcto, es decir, ver qué le pasaba a los vecinos y qué necesitaban. Por eso hicimos tertulias, siempre sin presupuesto; por eso íbamos a “La Ideal” que nos prestaba el lugar. Y después, en los distintos barrios, escuchando cuáles eran los problemas y armando los distintos casos y encontrando los elementos para defender lo nuestro, acercando material cuando se judicializaba, como fue la casa del obispo Podestá, una propiedad declarada patrimonio de la ciudad por haber sido el lugar donde vivió Podestá, pero además con valores que se remontan a mediados del siglo XIX.

M.B.: ¿Qué pasó con lo de Alfonsina?
M.C.: Buenos ahí tenemos un caso de cómo creo que es el patrimonio: yo tengo una formación en las humanidades y en la antropología, o sea: tengo una mirada antropológica del patrimonio; entonces creo que el patrimonio es una construcción social y como tal es la demostración de la experiencia y las prácticas de los distintos grupos sociales. Lo que pasa es que siempre se planteó al patrimonio como algo universal, es decir como que había un único patrimonio al cual adheríamos todos. Pero generalmente ese patrimonio, instituido como universal y único, era el patrimonio de las elites. Por eso, cuando fue el caso de Alfonsina, a mí se me ocurrió compararlo con Victoria Ocampo, porque todos pusieron en duda que ahí hubiera vivido Alfonsina Storni. En el caso de Victoria Ocampo nadie podía poner en duda que ella era la dueña de la casa de aquí o la de Mar del Plata, porque como era propietaria, había títulos o herencias, hubo una legitimación por parte del Estado de esas propiedades. En el caso de Alfonsina Storni, madre soltera, con lo que significaba ser una madre soltera en aquellos años, que tenía que ganarse la vida, trabajar para mantener a su hijo, que no era propietaria…

M.B.: Y no pertenecía a la elite…
M.C.: Ajena a la elite, rechazada por la elite, por esa posición casi de orgullo de ser una madre soltera y una mujer que se enfrentaba a los hombres… Ella era una inquilina. Y había que conocer de aquel Buenos Aires donde la gente muchas veces alquilaba de palabra. O tenía una pieza en una especie de conventillo… Sabiendo que ésa era la casa de Alfonsina Storni y habiendo un proyecto de ley…, la casa se tiró igual. Lamentablemente tuvimos que escuchar de algunas personas ligadas a las juntas históricas “que no estaba comprobado que ahí hubiera vivido Alfonsina”. Todo porque faltaba ese marco de legitimación que suele tener el patrimonio de las elites. Nosotros, de todos modos, encontramos referencias históricas y testimoniales de que allí vivió.

M.B.: Hay una tendencia a creer que el patrimonio se asienta sobre ladrillos, vale decir edificios. En su desempeño, frecuentemente, se validó más lo inmaterial…
M.C.: Patrimonio es mucho más que piedra y cal. Aquella mirada atrasa, por lo menos, sesenta años. Desde mediados del siglo pasado se pusieron en revisión una serie de conceptos acerca, inclusive, de la definición de cultura, a través de todos los organismos internacionales, donde la cultura se define en un marco de prácticas, de creencias, de saberes que excede ampliamente a la idea de cultura relacionada con las llamadas bellas artes o con los aspectos solamente estéticos, más allá de que yo creo que la estética tiene una base ideológica muy fuerte.
Nosotros consideramos que el patrimonio es un área de conflicto y de disputa,  pero no podemos hablar de un patrimonio de piedra y cal si no contiene algo simbólico. Es decir: nada perdura en el tiempo si no es desde un presente. Nosotros desde el presente le damos un valor al patrimonio, por eso es constantemente un diálogo de construcción y reconstrucción donde están de manera inescindible los valores simbólicos, lo que se suele llamar patrimonio intangible. No hay patrimonio tangible si no contiene un patrimonio intangible. No hay materia por un lado y espíritu por otro, ésta es una división que tiene un presupuesto ideológico. Cuando UNESCO hace la declaratoria de patrimonio inmaterial, en realidad está retomando un concepto que ya tenía UNESCO sobre cultura popular y le da una forma: en realidad cuando se habla de patrimonio inmaterial es lo que antes se definía como cultura popular. Es como una reivindicación de las expresiones más vulnerables. Y volvemos al comienzo de esta charla: mientras la Comisión, que era la hermanita pobre, se encargaba del patrimonio inmaterial, la Dirección se ocupaba del patrimonio material del que, en realidad, se encargaba el Ministerio de Desarrollo Urbano.
Es decir: nosotros, en este momento, estamos en una situación muy problemática respecto del patrimonio de la ciudad, porque tenemos una ley de emergencia patrimonial que hace que cualquier caso anterior a 1941 deba pasar por un Consejo Asesor de Asuntos Patrimoniales (CAAP) integrado hoy exclusivamente por arquitectos, como si en pleno siglo XXI la multidisciplina no fuera una necesidad.

M.B.: Volvemos a lo de piedra y cal…
M.C.: Exacto… En un momento se le habían incorporado los historiadores y en otro los arqueólogos. Pero eso es una mirada del siglo XIX… Hoy hay un montón de disciplinas que tiene que decidir sobre el patrimonio, y no sólo esas tres. Cuando te decía que son todos arquitectos, lo llamativo es que en sus curriculums no hay una sola línea que hable de patrimonio. Son arquitectos urbanistas con una concepción de la ciudad propia del Código de Planeamiento Urbano de la década de 1960 donde una casa familiar de planta baja era un desperdicio urbanístico porque ahí podrían construirse varios pisos que, definitivamente, no solucionan el problema habitacional de la ciudad, porque entonces sí podríamos sacrificar el problema patrimonial en aras del problema social. Al revés, se está produciendo en los barrios del sur un problema que hace que los pobladores que alquilan –las Alfonsinas de esta época– se tengan que ir en virtud de los negocios inmobiliarios de unos pocos.

M.B.: ¿Cómo cree que sigue o cómo desearía que siguiera toda esta historia?
M.C.: Yo no esperaba una reacción de las organizaciones barriales de esta magnitud. Me voy contenta por la tarea realizada y asombrada, pasmada por el apoyo…

M.B.: Algo habrá hecho…
M.C.: …y a alguien habré molestado porque creo que la forma en que se cambió la Comisión… Y te voy a dar un dato: hace unos meses se habían renovado los representantes del Ejecutivo. Siempre había estado el arquitecto Peña o personas de la talla de Orsetti… Bueno esos lugares fueron ocupados por empleados de la Dirección de Patrimonio. Hoy todos los miembros puestos por el Ejecutivo son empleados de Liliana Barela lo que constituye un vaciamiento de la Comisión, porque, obviamente, no hay independencia de criterios y eso se vio claramente en las pocas reuniones que mantuvimos este año.

M.B.: ¿Cómo se produjo su relevo?
M.C.: Fue por medio de un proyecto presentado sobre tablas donde no hubo posibilidad de que se discutieran comisiones, ni que los diputados tuvieran en sus bancas los curriculums de los postulantes; todo eso hace pensar que necesitaban sacarme rápidamente de ese lugar, no porque yo fuera una persona excepcional sino porque creo que mis convicciones firmes, que cuentan con el apoyo de quienes yo quería que me apoyaran, se estaban tornando molestas. En estos días he recibido el apoyo explícito, sin excepciones, de todas las organizaciones que están luchando por el patrimonio. Me han llamado legisladores, incluso los que han votado esa ley, pidiéndome disculpas y diciéndome que quieren hacer algo para reparar esa situación. Pero lo concreto es que me llevo el apoyo de Jaime Sorín, de Trinchera de la Facultad de Filosofía y Letras, de Gómez Coronado…, es decir: una infinidad de personas que lo que me están marcando es que esto no puede terminar acá. Ahora desde la sociedad civil organizaremos ese conjunto de instituciones y desde ahí veremos qué es lo que pasa con el patrimonio. Estaremos observando al CAAP desde afuera exigiendo que se transparente, que se abran las reuniones, porque ningún ámbito de la Ciudad de Buenos Aires puede mantenerse en secreto cuando sus decisiones son vinculantes.

viernes, 1 de junio de 2012

COMISIÓN DE CULTURA Y PATRIMONIO – Consejo Consultivo Comuna 7 Novedades en la Comuna sobre el Patrimonio urbano e intervenciones en el espacio público. 1er. Semestre 2012

COMISIÓN DE CULTURA Y PATRIMONIO – Consejo Consultivo Comuna 7

Novedades en la Comuna sobre el Patrimonio urbano e intervenciones en el espacio público.

1er. Semestre 2012

Puesta en valor Plazoleta José Luis Romero-Pacará de Segurola

El día 30 de mayo comenzaron las obras para la ejecución del proyecto de Puesta en Valor de la plazoleta donde se encuentra el árbol histórico conocido como Pacará de Segurola, teniéndose en cuenta los aportes de la Comisión de Cultura y Patrimonio del Consejo Consultivo.
Se deberán atender recomendaciones de la Comisión Nacional de Museos Monumentos y Lugares Históricos, garantizando la protección del árbol y el sitio, suelo permeable que permita  buena absorción del agua, y controles fitosanitarios anuales, dentro de una propuesta de espacio verde y de recreación.





Casa de Baldomero Fernández Moreno.

En Francisco Bilbao 2384 se encuentra la hermosa casona que fuera el hogar familiar de Baldomero Fernández Moreno.  Muchos vecinos reclaman se haga efectiva la ley 24.678, de 1996, que la declara Monumento Histórico Artístico Nacional, y dispone su compra mediante el mecanismo de suscripción popular. Además de preservarla, la ley dispone que se abra como centro cultural, con museo, centro de exposiciones y debates, y de estudios literarios e históricos. Nunca se abrió la cuenta correspondiente en el Banco Nación, como tampoco se convocó a las entidades que deberían integrar la Comisión Honoraria





Casa de Alfonsina Storni. Demolición ilegal.

En Terrada 578, se demolió en el mes de diciembre la última de las viviendas donde habitó la poetisa Alfonsina Storni, de allí partió a Mar del Plata, donde terminó su vida. A pesar que se trataba de una humilde casa de barrio, su valor era histórico y simbólico. En el barrio, muchos vecinos reclamaban su uso como centro cultural.  Hubo acciones para detener la demolición, que fue clandestina e ilegal, la casa tenía protección preventiva y no se la podía demoler, se encontraba bajo el amparo de la Ley 3056 y 1227, de Patrimonio Cultural.
El defensor del Pueblo adjunto porteño Gerardo Gómez Coronado, tenía desde 2010 una actuación para mantener la causa abierta en la Defensoría, pero ante el hecho consumado, reclamó que el Gobierno porteño aplique las sanciones previstas para los responsables de la demolición de edificios catalogados. Una de estas penas, es sólo permitirles construir el 70% de la superficie que demolieron.




Ex usina eléctrica, Faraday 1510. Obra en construcción.

La ex usina eléctrica de la calle Faraday 1510, es una edificación histórica, que forma un conjunto arquitectónico con todas las ex centralitas eléctricas de la Ciudad, y que comparten una tipología característica, por lo que se dispuso la protección de todas ellas, mediante una catalogación de tipo  cautelar, desde el año 2010. Esto significa que el/los propietarios deben respetar su fachada y aspecto exterior particular, que hacen al paisaje urbano.
Actualmente en este lugar se están ejecutando obras de construcción, donde se observa la alteración de fachadas, levantamiento de alturas y añadido de balcones en saliente sobre el  frente.
Vecinos han tomado fotografías y se han enviado a la Defensoría-Patrimonio, y a otros organismos para que tomen intervención en el asunto. En el caso de haber pasado más de 15 días, si se pidió información a través de la Ley 104, se está habilitado para iniciar recurso de amparo.


Mercado de Flores

El Mercado de Flores, espacio de propiedad de la Comuna 7, tiene un proyecto en estudio en la Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires, que trata sobre su cesión a la Cooperativa Libertadores de América, por un lapso de veinte años. El mismo fue aprobado en primera lectura, presentado en Audiencia pública, y a la espera de su segunda lectura.
Dada las divergentes opiniones por parte de los vecinos participativos, sobre el tratamiento del predio, la posibilidad que sea vendido, o destinado para otros fines, se prevé la elaboración de un proyecto de ley de protección estructural, que contemple su carácter histórico y simbólico para la Comuna 7, que  garantice tanto la conservación edilicia, como su función social, destinándose para actividades culturales por y para los vecinos: centro de exposiciones, sede del Museo Histórico Vecinal de Flores, biblioteca y hemeroteca, espacio para reuniones de comisiones y plenarios del Consejo Consultivo, espacio para reuniones y actos escolares.


Proyecto de enrejado de la Plaza Pueyrredón

El Consejo Consultivo de la Comuna 7, resolvió en el plenario de mayp, por mayoría, solicitar a la Junta Comunal y al Min. De desarrollo Urbano, una medida precautoria de no innovar,  sobre la plaza Pueyrredón de Flores, en tanto se encuentren en estudio otros proyectos propuestos por vecinos. El proyecto de enrejado propuesto desde la dirección de la Junta, no fue consensuado dentro de su ámbito de competencia, que es el Consejo Consultivo. Está dentro de las funciones de dicho Consejo, la canalización de propuestas y proyectos elaborados por los vecinos, a fin de garantizar la plena participación de los ciudadanos de la Comuna.


Áreas a proteger en la Comuna 7

Existen en la Comuna 7 varias zonas con características particulares que responden a los orígenes de cada barrio, y a un entramado social y cultural determinado.  Consideramos que estas áreas  necesitan una legislación apropiada que las proteja del avance inmobiliario, ya que se ve afectado no sólo el funcionamiento de los servicios, sino el medioambiente y la calidad de vida de las personas.  La instalación de edificación en altura no sólo destruye el paisaje del barrio, sino que rompe las redes sociales y culturales locales.
Barrios representativos de la Comuna 7, que requieren protección: Parque Chacabuco y entorno, Bº Butteler, Bº Emilio Mitre, Bº Varela, Bº Bonorino, Bº Simón Bolívar, Bº Balbastro.


Cine Pueyrredón

El cine Pueyrredón, inaugurado en 1873, cuenta con la protección que le da su inclusión en la ley de APH 15 Flores Casco Histórico (área de protección histórica),, además de la ley 1227 de Patrimonio Cultural, y la Ley Nacional de Teatros Nº 24.800/97.
Al vencer el plazo de los alquileres que se han dado sobre el inmueble, se espera su puesta en valor y recuperación de sus funciones originales.
En diciembre de 2009 fue declarado “sitio de interés cultural por su valor simbólico e identitario del barrio de Flores, por iniciativa de la legisladora Diana Maffía, que presentó un proyecto según el  cual podrá ser destinado exclusivamente a cine, teatro y actividades culturales.
Se inician diversas acciones en pos de su recuperación, colocación de una placa en su frente y funciones al aire libre.


Polideportivo Parque Chacabuco
En los últimos días los vecinos y usuarios del polideportivo de Parque Chacabuco se han movilizado a raíz de versiones que circulan en Noticias Urbanas, donde se anuncia que el Gob.de la Ciudad dispondrá del gimnasio cubierto para ubicar oficinas administrativas. En el gimnasio se desarrollan clases de gimnasia aeróbica, gim. para la 3ª edad, yoga, yudo infantil y adultos, complementos, etc. Los vecinos están solicitando información, y manifiestan sus derechos como ciudadanos, al uso público y gratuito de este espacio.

jueves, 16 de febrero de 2012

LEY Nº 4104 - PERMISOS PARA DEMOLER, CONSTRUIR O REFACCIONAR - PROTECCIÓN DE SALAS DE CINES Y TEATROS

LEY N.° 4104
Buenos Aires, 1º de diciembre de 2011
La Legislatura de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires
sanciona con fuerza de
                                                      
Boletín Oficial de la Ciudad de Buenos Aires
N° 3850 - 08/02/2012
Página N° 12

Artículo 1º.- Modificase del Código de Edificación en la sección II el punto 2.1.1.1
REQUERIMIENTO DE PERMISO que quedará redactado de la siguiente manera:

2.1.1.1 Trabajos que requieren permiso de obra
Se deberá solicitar permiso para Construir nuevos edificios.
Ampliar, refaccionar o transformar lo ya construido.
Cerrar, abrir o modificar vanos en la fachada principal.
Cambiar y ejecutar revoque de fachada principal.
Elevar muros.
Cambiar o modificar estructuras de techos.
Desmontar y excavar terrenos.
Efectuar demoliciones.
En los casos de demolición total o parcial de teatros o cines
-Teatros: el propietario del predio tendrá obligación de construir en el nuevo edificio una sala teatral o cine-teatral de características semejantes a la sala demolida, entendiéndose como semejante respetar hasta un 10% menos el número total de butacas, igual superficie del escenario y camarines, otorgándole al propietario la posibilidad de dividir esa totalidad en distintas salas de menor tamaño a construirse en ese mismo predio.
El plazo para cumplir esta obligación será de 365 días corridos a partir de la fecha en que se Le conceda la autorización para demoler, y podrá ser prorrogado por igual período, en caso de obras de gran complejidad, por resolución conjunta del Ministerio de Cultura y de Desarrollo Urbano de la Ciudad.
En caso de venta o alquiler de la parcela una vez demolido el edificio preexistente la
obligación recaerá en el nuevo propietario o locatario.
Efectuar instalaciones mecánicas, eléctricas, térmicas, de inflamables y sanitarias, y ampliar, refaccionar o trasformar las existentes,
Abrir vías públicas,
Mensurar predios y modificar el estado parcelario;
Construir, ampliar o refaccionar playas de estacionamiento.

Art. 2º.- Comuníquese, etc. Moscariello - Perez

viernes, 30 de diciembre de 2011

Estrategias de termita - Nota publicada en DZ


Edificios que se demuelen a escondidas. Nuevas demandas habitacionales. "De la demolición de la casa de Alfonsina nos enteramos por los medios. Fue un insulto", comenta Santiago Pusso, vicepresidente de la ONG Basta de Demoler.
La metodología utilizada en Flores y Floresta cuando se demuele algo en forma ilegal es aprovechar un fin de semana largo. "Nosotros temblamos, los vecinos están en alerta recorriendo, porque siempre las demoliciones sorpresivas e ilegales se hacen en fin de semana o fin de semana largo" comenta el arquitecto Gabriel de Bella, secretario de la Asociación Civil Salvar a Floresta. Otra estrategia es la denominada "proceso de termita"; cuando un propietario quiere vender un inmueble que tiene valor patrimonial se estila sacarle el techo, de esta manera se va mojando y se arruina por adentro. Luego, se hace la presentación de demolición y el Consejo Asesor de Asuntos Patrimoniales, al ver todo destruido, autoriza su demolición.
Flores y Floresta tienen situaciones similares. Hoy Flores sufre demoliciones por dos frentes: el lado este de la avenida Nazca que, con la llegada del subte, están destinadas a construir grandes torres. Del lado oeste se está produciendo otra mutilación de la fisonomía urbana producto del centro comercial Avellaneda. Según explicó a Diario Z De Bella, "arrancó siendo eso pero se degeneró con la proliferación de talleres clandestinos, que violan las normas urbanas." Salvar a Floresta nació en 2009, cuando una empresa constructora proyectó una gran torre al lado de una casita. La torre finalmente se construyó pero los defensores del patrimonio le encontraron la parte positiva: "Me sirve como mirador. Voy hasta el piso doce y desde ahí veo todos los centros de manzanas". En la zona oeste de Flores y Floresta se están invadiendo los centros de manzana, desde donde avanzan hasta llegar a los locales. Otro problema es que los fines de semana largos son utilizados para cambiar completamente el frente de una casa e instalar persianas para armar un local. "Nos destruyen todo para hacer persianas metálicas", se queja De Bella.

El primer logro de esta asociación fue salvar el Castillito de la calle Dolores 438, Una casona antigua, de estilo ecléctico. Apareció el cartel de venta y los vecinos se pusieron a trabajar. El terreno valía un millón y medio de dólares, pero la casona se terminó vendiendo a seiscientos mil. "¡Y encima no se la puede tocar! Fue nuestra primera gran satisfacción."
Tanto Flores como Floresta tienen sus áreas de protección histórica (APH), con el correspondiente catálogo de los inmuebles protegidos. No fue fácil para Floresta conseguir ese APH porque se argumentaba que el barrio no "merecía" tener un área protegida, las áreas de protección histórica apuntaban a barrios como Barrio Parque, Recoleta, antiguos edificios y grandes caserones, "y no un barrio bajo de casitas antiguas de tipo chorizo".
El radio turístico que propone hoy la ciudad es muy acotado. "Para alguien que viene de afuera, el diseño de Flores es maravilloso pero no es tenido en cuenta" afirma De Bella. Es un pequeño pueblo que quedó dentro de la ciudad, con su plaza central, la estación de tren el colegio y la iglesia.
Muchos lugares emblemáticos han sido demolidos. En Flores, las casas de Baldomero Fernández Moreno y Conrado Nalé Roxlo fueron demolidas. En Floresta, tiraron abajo, hace más de veinte años, la casa de Alicia Moreau de Justo. La casa de Hugo del Carril tampoco tuvo suerte. La casa de Alfonsina es la herida más reciente al patrimonio.
A pesar de todo, la lucha sigue. Se preservó, por ejemplo, el empedrado de la calle Bacacay que tiene más de cien años. "Por esas calles caminaban Roberto Art y Baldomero Fernández Moreno. Queremos preservar el paisaje. Si los ladrillos pudieran hablar, hablarían de ellos."
DZ/km

Ana Isabel Guérin Redacción Z

miércoles, 28 de diciembre de 2011

LA JUSTICIA DE LA CIUDAD ORDENÓ PROTEGER LOS INMUEBLES ANTERIORES A 1941

Fallo Histórico: LA JUSTICIA DE LA CIUDAD ORDENÓ PROTEGER LOS INMUEBLES ANTERIORES A 1941

Diciembre, 24, 2011.
COMUNICADO DE PRENSA
El 23 de diciembre, la jueza Andrea Danas, titular del Juzgado en lo Contencioso Administrativo y Tributario de la Ciudad N º 9, resolvió ordenarle al Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires la suspensión del otorgamiento de permisos de demolición u obra respecto de la totalidad de inmuebles de dominio público o privado emplazados en el territorio de la Ciudad de Buenos Aires, cuya fecha de construcción sea anterior al año 1941 o se encuentren incluidos en el inventario de la Subsecretaría de Patrimonio Cultural en la categoría “Edificios Representativos”. Todo ello con excepción de aquellos casos en que el Consejo Asesor de Asuntos Patrimoniales resuelva en forma expresa e individualizada que el inmueble no posee valor patrimonial.
En el texto del fallo se aclara además que la decisión “no afectará la realización de aquellas medidas conservativas necesarias para preservar la vida o la salud de las personas, previa evaluación de deberá evaluar el organismo técnico competente”.
La referida medida, que debió ser adoptada ante la inminencia de la pérdida de vigencia (el próximo 31/12/2011) de la Ley Nº 2.548 que establece un Procedimiento Especial de Protección Patrimonial para dichos inmuebles, fue dispuesta en el marco de una acción de amparo iniciada por las organizaciones “Basta de Demoler”, “Fundación Ciudad” y “S.O.S. Caballito” patrocinados por la  Dra. María Carmen Arias Usandivaras juntamente con los abogados Jonatan Baldiviezo, Sebastián Pilo y Enrique Viale. A su vez, adhirieron al amparo las agrupaciones  Proteger Barracas, Salvemos Floresta y la Protocomuna Caballito, entre otras.
Durante el año 2012, la Legislatura de la Ciudad deberá tratar los proyectos de ley que promueven dar protección legal efectiva a estos inmuebles patrimonialmente valiosos. La medida judicial dispuesta permitirá que mientras transcurra dicho debate no exista especulación inmobiliaria que pretenda apurar las demoliciones aprovechando la desprotección legal.
El fallo reviste una importancia trascendental en la protección del patrimonio histórico, arquitectónico y cultural de la Ciudad, como valores integrantes del derecho urbano ambiental. A su vez, será un antecedente de suma relevancia para casos similares en todo el país.
Con este fallo ejemplar se prioriza el  respeto a la constitución de la Ciudad y de la Nación y se escucha el reclamo de los ciudadanos  que no están dispuestos a perder el patrimonio arquitectónico que los identifica y da carácter y significación a sus barrios.